viernes, 30 de julio de 2010

DIARIO 10: Como un hombre, ¿yo?


Ahora sí puedo decir con toda seguridad: "He caído en la tentación". Rompí el silencio entre mi cuaderno y yo: Comencé mi nueva obra. Era de esperarse, ¿no? Pero estoy feliz, bastante satisfecha. Conforme la obra avanza más me va gustando. Debo confesar que escribir como un hombre es un gran reto, pero gozo con la suerte de que pude prepararme antes leyendo el manual de seducción de Juggler, estudiando su actitud, investigando en Internet, hasta observando a la gran mayoría de varones en mi colegio; puedo asegurar que, si bien no puedo saberlo todo sobre ELLOS, estoy bastante cerca de esa meta. Ser mujer sólo me resulta una desventaja en este caso. Por supuesto, me encargué de crear un personaje pacífico, no tan "macho" -por así decirlo, jajaja-, no podría tolerarlo, no sería algo que disfrutaría. Creo que lo que más me atrajo a la idea de representar un hombre fue que era un reto, algo distinto a lo que venía haciendo. Sólo tengo para decir que no se preocupen, chicos, estoy siendo bastante cuidadosa en cuanto a gestos, opiniones, conjeturas, mujeres y reacciones. De verdad soy un hombre cuando retomo mi bolígrafo, jajaja. Es mejor eso a ofrecer un personaje... raro.
Tenía tanto tiempo sin escribir un diario que ya no hallo qué decir. La verdad es que estoy aquí sólo para hablar de escrituras o lecturas; y, justo ahora, todo lo que me está saturando es mi nueva obra. ¡Ah! Hace poco empecé a leer "Mujercitas" de Louisa May Alcott, aún no puedo dar mi opinión, pues no llevo más de doce páginas, pero, al terminar, de seguro hablaré sobre eso aquí. Estoy segura, de igual manera, que es un libro muy bueno por la recomendación de mi madre. Estoy ansiosa por leerlo, sólo que a veces -mientras escribo un libro- es totalmente difícil e imposible para mí centrar mi atención en otra cosa que no sea eso. He dicho punto y final.

Hicimos del silencio la ley.



Que era como la oscuridad nuestro silencio: misteriosa, tranquila, intrigante. Cuando no decíamos nada, lo sabíamos todo; era como jugar a las escondidas y saber tus escondites. Nuestros silencios perduraban, por que nos decíamos más con la mirada y todo con el cuerpo; por que recuerdo tus gestos y era eso mejor que el que dijeras una palabra. Fue allí cuando hicimos del silencio nuestra ley, del misterio que nos deja el premio. Debíamos investigarnos y eso era mejor que romper el hilo silente de la ausencia de tu voz. Preferíamos quebrar aquello sólo con caricias y besos, las palabras nos parecían innecesarias, escenas imaginarias, una condena eterna que te ata por siempre a cualquier error. Preferíamos el silencio, por que lo hacíamos nuestro, por que invadíamos la habitacion sin escándalos, por que me acariciabas las mejillas y sonaba exquisito, por que te miraba a los ojos y tus pestañeos ya eran ruidosos. Fue entonces cuando hicimos del ruido nuestro esclavo y lo penalizamos todo con silencio eterno. Nuestro propio silencio.

miércoles, 28 de julio de 2010

Ella.

No lo imaginé jamás, no pensé que el primer amor me sorprendería resultándome, sólo por ahora, inalcanzable. No quisiera ser así, pero resulta que me he enamorado, he fallado ante mi autocontrol; no pude detener las sospechas de las personas a mi alrededor, ni las de mi propio corazón. ¿Por qué negármelo? Tratar de huir a lo inminente, intentar sacar de mi cabeza tus gestos, tus palabras, tu boca, la sonrisa que me gusta en ti; sin poderte decir nada, odiándome por parecer tan obvia, tan fuera de mí, alejada de mi realidad, pero sin olvidarla a ella, sin dejarla escapar en mi cabeza, sólo quisiera saber si tú la dejas ir, aunque sea de vez en cuando, me conformaría con saber cuánto la quieres o si es que la amas o al menos cuánto podrías llegar a dar por ella, ¿qué es lo que te gusta de su persona? Si ella como mujer te parece hermosa, ¿acaso más que yo? Soy un aprendiz, una principiante y fallé por mi inexperiencia, no supe darle mi amor a otro hombre que no fueras tú. Si supieras cuán difícil es para mí, tal vez voltearías a pensar un poco más sobre lo que me pasa. No tengo otra opción que el tiempo, no hay más salida que esperar, por que no quiero hacerme daño, no voy a luchar por ti, por que no soy así, ya deberías saberlo, pero claro... supongo que no; por que soy nueva en este asunto, no entiendo del amor, no sé qué se debe hacer ante esta situación, sino solamente alejarme, cederte espacio, no renunciar a ti, pues nunca te tuve, sólo olvidarte, mientras te pensaba escondida en mis sentimientos.

Para aquellos amores cuyas pasiones son frenadas por Ella, que no queremos hacerle el mínimo daño, pero deseamos lo que ella más quiere.
Ironía, ¡Cómo me matas!

martes, 27 de julio de 2010

De la vida...

- Estás dando señales equivocadas.


- ¿Tú crees?- dudó, alzando su mano y haciendo chasquear tres veces sus dedos pulgar y medio.


Qué ironía, ¿no?

sábado, 24 de julio de 2010

Esta peligrosa unión.


Hazme un lugar a tu lado, que el tiempo no pare de correr, cada segundo cuenta si es contigo, cada minuto me llena cuando estamos cercanos. Recuerda, estuve contigo en las buenas, lo estaré en las malas también. Ten presente, que mi presente es contigo y mi futuro dependerá de éstas palabras. Analiza, ya basta de impulsos; un beso que me silencie para siempre será mi cura permanente. Permanece, estáte siempre cerca, no te alejes, no me dejes, que las inexorables agujas de mi reloj dan la hora por nuestro amor.
¡Oh! ¡Terrible obsesión! Recuérdame, aún y cuando ésta enfermedad nos haga olvidar, aún y cuando el final nos ahogue y nuestro corazón deje de bailar a nuestro ritmo, aún y cuando nos separen en el lecho de nuestra muerte, no me olvides, que el tiempo no dejará de correr, que las inexorables agujas de mi reloj van a parar, pero jamás dejarán de sentir.
Tierno amor mío, no importa cuánto peso haya sobre nuestros cuerpos, sabré tenerte presente. Deséame, ¿qué no entiendes que esto es mutuo? ¡Comprende! Esto es imposible para los demás, no para nosotros, que lo sentimos prohibido, pero tan emocionante. Para nosotros, que esta unión es el final del comienzo, un calmante a nuestros anhelos, que ya desenfrenados venían al ataque; estamos listos para arremeter a los negados, a los impenetrables, los que no entienden este peligroso amor, esta condena del corazón; esos mismos que planean imponer un escarmiento para distanciarnos, y que prefieren inmiscuirse entre nosotros. Sólo a ellos venceremos, por que este peligro...
... Este peligro nos hace poderosos, amor mío.


- ¿Dónde estáis, alma mía?- divulgó la mujer al viento.


- ¡Aquí, flor de mi vida!- le atesoró su hombre.


- ¡Escapad conmigo!


- Vosotros no escapáis, mi dulce doncella, ¡Vosotros dirigid al lugar donde nos amaréis por siempre!


Como suave caricia, el hombre tomó la mano de su doncella. Juntos fueron en busca de ese lugar que los sudyugaría por siempre a la eterna felicidad y los convertiría en fantasmas ante la vista de los negados.

viernes, 23 de julio de 2010

Eterno enamorado.


"No hago tratos con aventuras. Soy un hombre que disfruta el tiempo a solas y cree en la verdad, a penas comienza la noche soy capaz de conquistarme a mí mismo con una copa de vino, a falta de esa mujer que creé en mi cabeza, que moldeé con mis deseos y diseñé con mi cuerpo. No es ese tipo de mujer, pues no hay más como ella, pero sí sería del estereotipo que voltearías a ver una y otra y otra vez. Soy un hombre solitario, no un conquistador nato ni un casanova estudiado, soy un hombre inteligente, que en vez de buscar placer, busca la eternidad, implora materializar y busca indagar. No sé jugar y no me interesa aprender.
No soy un conquistador, más bien me considero un hombre que busca el amor. Un eterno enamorado."


No terminaría siendo más que una ingrata sino dedicara éste poema a la persona que me permitió obtener la idea. Gracias, Kristian.

De la vida...

Miénteme como te miento, que si te digo que te quiero, tú dices que es incierto.

martes, 20 de julio de 2010

En pie de guerra.


Vas a armar un ejército con mi corazón, con cada célula de mi interior. Cederás espacio a mis celos, sacarás mi lado más rudo con violencia, pero valdrá la pena. En pie de guerrá estaré por tu amor, dispuesta a decaer, pero no rendir, lista para ser lastimada, pero jamás derrotada. Esta batalla no perderé, hasta con trampa te obtendré. Eres un premio único y te voy a tener. Merezco lo que traes contigo: besos, caricias y suaves melodías. Tú sabes que ganaré, si es por ti, esta batalla será mía. Todo, lo que sea por este alocado amor, contra lo que se interponga, por tu suave olor, dolores y hasta sangre por obtener tu amor. En pie de guerra permaneceré, nadie ni nada me hará decaer. Esta vez serás sólo para mí. Eternamente, sólo para mí.

domingo, 18 de julio de 2010

Celos.

Las manos me empiezan a sudar frío, parece que mi nuca arde, el cuerpo entero se me llena de tensión. No puedo con tanto, no soporto las imágenes en mi cabeza, no puedo sostener las palabras que pudieron haberse intercambiado. ¡Me siento tan incómoda! Tan celosa, la envidia me carcome; es como un virus que se me desata en el corazón y corre hasta mi cerebro activando cada célula, enervando cada átomo de mi materia, prendiendo fuego en mis pupilas, dejándome en el exterior, donde todo luce peor. Me exasperas. No puedo evitar ponerme en su lugar, ese mismo hasta donde tus caricias le rozan la mejilla, la llevan al paraíso, y a mí me volvían loca. No puedo, sino sólo querer ser ella, que aunque tanto la odio quiero ser idéntica a ella; en cuanto la llames quiero ser quien responda, cuando la mires, quiero ser quien te mire, al mismo momento en que la beses, quiero ser yo quien lo haga. Pero no puedo, sino sólo quedarme en el exterior, donde todo luce peor, donde sólo soy yo, sin ti, con celos, con envidia, codiciándote, queriendo ser alguien a quien odio tanto.

Estas cuatro paredes.



Esta llamada sin sentido, este aire que respiro, esta vida que vivo, este amor que me ahoga, mi sangre roja corre por tus manos, dándote permiso de manejarme, llevarme a tu gusto, traerme a tu hora, dominarme cada minuto. Ese cielo imprevisto, la inminente ola de presión, el extrañable sonido de tu voz, lo raro entre los dos, el estreno de mi corazón. Este amor que bloquea mis sentidos, es tan fácil, tan sin motivos. Me traes, me llevas, me amarras, me sofocas, me manejas cual muñeca. Este amor, estas cuatro paredes, aquel cielo, tú y yo, la muerte sin ti, la vida eterna a tu lado, las sonrisas contigo, las tristezas en tu ausencia en estas cuatro paredes, la agonía, el recuerdo, el homenaje, lo recuerdo. Estoy loca, en estas cuatro paredes. Te reescribo, te olvido, te tengo, te dejo, me llevas, te traigo, susurras tan de espacio, me seduces tan fácil, soy tan tuya, tan de estas cuatro paredes. Tú y yo, más el aliento, la valentía, como en un cuento. En estas cuatro paredes tu sombra, un rato junto a mí al otro tras de mí, como en un cuento. Mi sangre roja en tus manos, manejándome has estado. Estas cuatro paredes, la soledad, puedo traspasarte, no eres de verdad.


miércoles, 14 de julio de 2010

...

- Hola.
- Hola.
- Sabes, he estado pensando en el amor...
- ¿Amor? ¿Qué es eso?
- Ya tú sabes, no te hagas la tonta.
- No me hago la tonta. ¿Por qué debería hacerme la tonta? Soy muy inteligente. No como tú.
- Como iba diciendo...
- Sólo absurdos.
- El amor- suspiré-, ha de haberte ido muy mal en ese tema, ¿no?
- Ja. Ja. Tonto.
- Me insultas, me agredes, eres violenta...
- Y aún así sigues tras de mí como idiota.
- Eh, eh, eh. Espera. Hablaba del amor y terminamos en "idiota".
- El amor es idiota, tienen que ver entre sí. Entonces es como una gran familia; tú estás obsesionado con el amor que es una idiotez, tú eres idiota y así consecutivamente.
- No sabes nada del amor.
- ¿Amor? ¿Qué es eso?
- Puedes dejar de decir eso, "encanto".
- Idiota.
- Hermosa.

De la vida...

Mírame en silencio, así tus pupilas hablarán por ti.

Búsqueda.

A penas salga el sol, búscame, te estaré esperando. A penas la luna se enconda, grita, estaré oyendo. Al mismísimo instante en que pase por tu cabeza, piénsame, estaré leyendo tus gestos. Llámame, justo cuando me necesites, estaré al pendiente. A penas y empiece a llover, avísame, que iré en tu búsqueda. Luego de quedarte solo, susurra mi nombre y me haré notar. Seguramente no pase, pero si llegas a olvidarte de mí, avísame, te haré recordar. Es posible que de repente te sientas inquieto, entonces pídeme que te tranquilice; dices que soy tu equilibrio. Recuerda enviar un mensaje al despertarte, ya yo lo habré hecho. Tan sólo, deséame y estaré a tu lado. Tan pronto y requieras atención, estaré atendiéndote. Sencillamente, búscame, ya yo te habré encontrado. Grítame, ya yo habré escuchado. Ámame, yo seguiré amándote.

martes, 13 de julio de 2010

Déjame sola.

Te pido porfavor que no me sigas ayudando. Deja que la tristeza me haga aprender de mis errores; déjame pensar y razonar conmigo misma; déjame analizar y pedir opinión de mi conciencia; déjame seguir siendo quien te ama y quien daría todo por ti, pero sólo por esta vez, por favor, déjame sola.
Cierra la puerta, las ventanas y tus ojos. No permitas que nadie entre y no dejes que sepan de mí; déjame sola para afrontar estas cosas que me pasan. Deja que pase el tiempo y luego permíteme salir poco a poco de cada duda. Déjame sola, pero no me olvides. Después, sácame de ese cuarto, mírame y ámame como nunca, ya que soy una nueva persona.

De la vida...

De amores casi imposibles tú y de increíblemente posible estar enamorada de ti; cuando hasta ahora ha sido imposible conocerte, y de conocerte sólo sé tu nombre y de tu nombre es imposible no pensarte, por que es posible jamás poder olvidarte.

Desde allá.



Desde allá comprendía la realidad, tenía miedo de perderte, pero el que me perdió fuiste tú. Ya sabía que llorabas por mí y me enteré de que me extrañabas. Antes te veía y me sonreías, ahora soy yo quien pide sólo un recuerdo de nosotros. Desde allá comprendí lo difícil que es amar, pero lo grande y hermoso que es amarte. Aquí la vida no es vida, es tu alma ya que nunca vas a morir de nuevo. Yo sólo quisiera que éstas palabras llegaran a tus oídos, por que desde aquí, allá estás muy lejos. Te ama, tu ángel de amor.

viernes, 9 de julio de 2010

Tu pasado, mi presente.

Y me recuerdas el pasado, con esa mirada nostálgica, en cada movimiento tuyo vas dejando las ganas, poco a poco te desvives por el tiempo, añorando lo vivido, irrespetando al presente, doblegando tu propio reloj, con tu barrera indestuctible de recuerdos; enlistando momentos, atesorando escenas, imaginando fantasías propias de aquellos años, en esas horas de la tarde en que el mundo era sano y cuando mirabas, querías hacerlo todo el día, y cuando respirabas, deseabas no perder oxígeno en tu camino. Cuando caminabas, las calles se amoldaban a tus pasos, contando historias de otro pasado, conociendo tu camino sin conocerte, persiguiendo tu ruta al crear caminos; entre pasos de baile, el ruido de los patines, en la aspiración de las botas de colores, sucias y divertidas, riendo con tus amigos, que ahora también añoran aquellos tiempos, cantando con tus amigas las baladas en ingles que recién salían, idolatrando la competencia entre artistas con tu hermana y rebotando disonantes sobre sus pálidas camas rosadas, jugueteando con casets y dejando de un lado tus antiguas muñecas de trapo, mientras comes con tanta excitación un chocolate, a escondidas del resto, queriéndolo disfrutar sólo tú y eso no te hacía sentir culpable, era tu pasado, disfrutabas correr, saltar, cantar, imaginar, crear, escribir, calcular... amar, gritar. Añorabas ser la mujer que eres ahora.
Dedico este poema a mi mejor mujer, mi mejor consejera, mi mejor amiga y mi mejor ejemplo a seguir: Mi mamá. Te adoro.

domingo, 4 de julio de 2010

Dudas.

Si tal vez enumerara esas ocasiones, las palabras, los gestos, hasta las correcciones y los lamentos, la cifra justa de mis sentimientos, la órbita entera de lo que en verdad quiero, a lo mejor, sólo antes de que las dudas mitigen mis esperanzas y exista la incertidumbre eterna, que es mi mayor miedo, mi película de terror, la ley fallida de acción y arrepentimiento, tal vez entonces, sabría lo que quiero, cuándo lo quiero y si es contigo, si es después de ti, que si vale la pena organizar ideas, que si de verdad existe futuro cercano para los dos, lejos de las dudas, malditas dudas, dudas, dudas, cómo las desprecio, cómo me bloquean la vista, el sexto sentido...
... esta idiotez permanente, la pared entre tú y yo, nuestra relación y lo que quedará de ella luego de esta decisión. Allí vienen, dudas, dudas me hacen dudar, me atacan sin piedad, me nublan los pensamientos, noquean mi certeza, esconden sus recuerdos más significativos; dudas, venenosas dudas.

... De la vida.

Nunca dejaremos de ser un rival en esencia, en esencia rivalidad, en rivalidad presencia y por presencia indecencia, por cadentes, influyentes, para esta trágica sociedad que, al descender, se lleva a su relleno para poseer; poseer el miedo, ser de la mentira ego y de la maldad principales usuarios. Nunca dejaremos de ser rivales en esencia, sólo usuarios de la cadencia. Principales genios en pendencia.

sábado, 3 de julio de 2010

DIARIO 9: ...En 3D.


Ya entendí, sabía que algo pasaba, además de mis débiles ganas por cumplir mi palabra, además de eso y la enorme muralla invisible que se creó ante mis deseos, sin dudas, esto tenía que pasar... Era por Eclipse, la Saga de Crepúsculo escrita por Stephanie Meyer que no había sido capaz aún de empezar mi nueva obra. El grado de inspiración que te deja ver una película de esas es enorme, y no sólo eso: fui a ver el estreno de la película en la misma ciudad en que se desarrollaría la historia. Fue una mezcla de todo. La película me encantó tanto como el libro, la ciudad me embrujó con cada uno de sus más vergonzosos detalles y me siento, hoy más que nunca, lista para retomar en mi mano derecha lo que amo hacer. Las ideas... bueno, esas no dejan de llegar (Gracias a Dios), pero aprendí a retenerlas, a frenarlas, por así decirlo, para que, al oír el disparo de la pistola, metafóricamente, pudiera dejar que mi estilo de escritura fluyera.
¿Les he contado alguna vez de mi estilo para escribir? Ok, si tuviera que definirlo en una palabra, sería: Natural. Tan fluído como eso suena, tan innato, sin prefabricaciones; los sucesos en mis historias, mágicamente, se van uniendo como piezas perfectas y exactas de un rompecabezas. Eso es lo bonito de lo que escribo, todo viene hacia mí, yo no lo busco, a pesar de que lo quiero. No hay un estudio premeditado; nada de eso... Sólo VA FLUYENDO.
Me he dado cuenta de que personas como yo, y disculpen si sonaré algo "adelantada a los hechos", "ingenua y soñadora" o "poco modesta", pero nosotros los escritores lo vemos todo en 3D, por así decirlo. No podemos estar en un lugar sin mirar a nuestro alrededor e inconcientemente crear un idea increíble en nuestras cabezas, ya sea por ver la lluvia caer -me identifico mucho con esto-, o por el ruidoso rechinar de una puerta al cerrarse, o hasta con cerrar los ojos y sentir el frío que te roza la piel; en fin, por cualquier cosa, eso siempre lleva consigo una musa, foránea e indescifrable, que sabes te dará una idea, pero no conoces su procedencia. Se hace cada vez más emocionante, mientras te vas volviendo desgarradoramente observadora, aunque no llevas lentes, sabes que lo ves todo... ¿en 3D? Increíble, ¿no? Jajaja. He dicho punto y final.