viernes, 15 de marzo de 2013

Estoy enamorada.

   

   Estoy enamorada, es cierto, a algunos suele quedarles grande el sentimiento, pero no a mí, no es mi caso, pues estoy enamorada de ti. Confieso no tener idea de cómo amarte, de cómo ser tu novia y mucho menos de cómo agradarte todos los días, es cuestión de tiempo mientras descubres mis defectos y te das cuenta de que son más complicados de lo que pensabas, pero da igual, y es por ello que también creo amarte de forma egoísta, porque me da igual si puedes o no conmigo, si te atreves o no, si sales huyendo o te quedas de curioso, la verdad nada de eso me interesa: tú te quedas hoy, porque sí.
   Estoy enamorada del cielo hasta tus piernas, enamorada de toda la extensión de tu mandíbula, de la curvatura de tu espalda y el alcance de tus caricias. Estoy frenéticamente enamorada de los días como hoy, cuando apareces sonriente, con los brazos llenos de abrazos, con la idea de quedarte un rato pero con la aspiración de amanecer a mi lado. Estoy perdidamente enamorada de ti, desde el infinito y de regreso, desde la galaxia, entrando en la nada, hasta conocer tus siete miradas, tus nueve pecados. Estoy practicando para gustarte siempre, para besarte tanto, para vernos mucho. Eso hacemos las muchachas enamoradas: seguimos enamoradas por siempre, seguimos queriendo siempre, seguimos a la expectativa.
   Estoy enamorada, y quiero que el mundo lo sepa.

¿ya te enteraste?

No hay comentarios:

Publicar un comentario