Te acompaño desde acá, hombre fugaz.
Tengo miedo de voltear un segundo y no verte nunca más, por eso, quizás, te acompaño desde acá.
Para no verte sin querer, para no encontrarte por casualidad, para no ganarle al tiempo ni dejarme ganar, por eso, y mucho más, te acompaño desde acá.
Deberías saberlo ya.
No hay comentarios:
Publicar un comentario